De nuevo con centro en Cahors procedemos a visitar Saint-Cirq-Lapopie, otro de los numerosos pueblos de ensueño del Valle del Lot.
Nos dejamos ir con el gps del coche y nos lleva por la meseta. Pronto la vegetación se hace más densa y verde mientras viajamos por una caretera más bien estrecha.
A la llegada a Saint Cirq Lapopie podréis encontrar varios aparcamientos. A la izquierda encontrarás el P5. Solo necesitarás cruzar la carretera y un camino te lleva al pueblo tras 200 o 300 m andando. Más cerca del pueblo te lleva el P6 . Está a la derecha en la carretera de bajada y te queda más cerca del pueblo. Cualquiera de las dos opciones son buenas.
Andar por el pueblo es otra dimensión. Calles empinadas, casas con encanto, de tejados rojizos de gran pendiente, buena comida y de nuevo el vino Malbec de la zona. Como ya hizo André Breton,haciendolo como su lugar de residencia, déjate llevar por la calles y disfruta.
Ya desde un mirador desde el aparacmiento P5 podremos admirar las primeras vistas:
Y continuar la visita:
Se puede subir a los restos de la fortaleza o castillo sobre el peñasco que se eleva en el centro del pueblo, lugar desde el cual hay muy buenas vistas:
La iglesia fortificada, de enormes dimensiones, me pareció prescindible el interior.
Las calles están llenas, cómo no, de tiendecitas y restaurantes. El escaparate de esta es espectacularmente atractivo. |
Después de una buena comida, a la sombra, en una agradable teraza,, marchamos hacia Bouziès, donde queremos hacer un pequeño trayecto andando del "chemin de halage" o camino de sirga. Este camino, inicialmente situado a ambos lados del río permitía el arrastre de barcos o gabarras mediante tracción animal en la época del transporte fluvial, a modo como sucede en otros ríos y canales como el del Midi. Es posible hacer el camino andando o se tiene la posiblidad de hacerlo en barco. Este se toma en Bouziès. De cualquier forma, la parte más espectacular es la zona más cercana a esta población donde el camino de sirga está escabado sobre la pared rocosa del acantilado. Decidimos hacer un tramo andando; lo típico es hacerlo hasla la esclusa de Aulanac si no se quiere hacer el recorrido completo o no se tiene el tiempo necesario.
Son unos 4 km hasta Bouziès desde Lapopie. Allí hay un camping y una zona de arboleda espesa, muy verde, cerca del río, donde se puede dejar el coche, y desde allí hacer el recorrido andando.
Llegando a la esclusa encontraremos en la pared rocosa un bajo relieve realizado por un artista de ´Toulouse, Daniel Monnier, con motivos geométricos muy bellos y otros a semejanza de fósiles animales como ammonites o conchas .
El regreso se realiza de nuevo por la carretera siguiendo el Lot hasta Cahors.
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